¿Sabías que el hormigón poroso difiere en muchos aspectos del cemento? En esta nueva entrada de nuestro blog hacemos un breve repaso por las diferencias básicas entre ambos materiales.
De forma somera, podemos decir que la diferencia entre el hormigón y el cemento es que este último es un componente del primero. El hormigón es un material compuesto de agua, cemento y otros componentes. En Pavimentos Pavipor te recordamos que el cemento es un polvo muy fino de caliza (carbonato cálcico) y otros minerales que absorben el agua y actúan a modo de aglomerante de los agregados del hormigón. Estos agregados son la grava, la gravilla y la arena. Recuerda que la mezcla de agua, cemento y arena, sin sumar añadidos, es lo que se conoce como mortero.
Otra diferencia radica en el uso que se da a los dos materiales. Mientras que el cemento se puede usar como material de construcción en sí mismo, el hormigón poroso o de otro tipo no se puede hacer nunca sin cemento. En el caso del cemento, la mezcla de caliza, arcilla, hierro y otros minerales da lugar a un producto llamado Clinker. Este se muele junto al yeso hasta obtener ese polvo de color gris muy fino que conocemos como cemento. En construcción, al mezclar el cemento con agua se obtiene una pasta maleable. Existen varias clases de cementos. El más común es el Portland. Recuerda que el hormigón utiliza al cemento como material de unión. Sus agregados más habituales son piedra triturada, roca y arena.